El documental sobre algunas de las series más famosas de Nickelodeon, Quiet On Set, generó gran polémica con su estreno. Sin embargo, quien no había hablado hasta ahora es Ariana Grande, quien fue parte de algunas de las producciones como Victorious o Sam & Cat.
La docuserie de cinco episodios de Discovery se emitió en marzo y detalla escándalos –desde abuso sexual hasta abuso de poder– detrás de escena en el canal de televisión infantil, con especial atención en el mandato de Dan Schneider como productor y showrunner en programas como All That, The Amanda Show y Zoey 101. Desde entonces, Schneider ha presentó una demanda contra los productores del programa.
En una entrevista en el podcast Podcrushed, la cantante calificó las revelaciones del documental de “devastadoras”. Además, sostuvo que los terapeutas deberían ser “obligatorios” en todos los programas de televisión infantiles.
“Creo que es necesario hacer que el entorno sea más seguro si los niños van a actuar, y creo que debería haber terapeutas”, dijo Grande. “Creo que a los padres se les debería permitir estar donde quieran, y creo que no sólo en los sets de los niños”.
Luego agregó: “Si alguien quiere hacer esto, o música, o cualquier cosa con este nivel de exposición, debería haber en el contrato algo sobre que la terapia es obligatoria dos o tres veces por semana, o algo así”.
La cantante también habló específicamente sobre su experiencia Victorious y sobre su spin-off Sam & Cat. De esa manera, señaló que está “reprocesando” su relación con los programas y que está “molesta” con parte del contenido de ellos.