El papa Francisco tuvo una audiencia este viernes con más de un centenar de humoristas y actores de comedia de todo el mundo al que acudieron varios comediantes de países latinoamericanos como la argentina Malena Guinzburg, la mexicana Florinda Meza García o las colombianas Liss Pereira, Paula Arcila y Maribel Trujillo Botello.
La humorista Guinzburg le regaló al pontífice unos alfajores, “porque es una comida dulce que supongo que si acá no la tiene la debe extrañar”, aseguró a EFE la cómica, quien le pidió al papa un mensaje para Argentina. “Defiendan la nobleza del país”, le respondió el papa, según explicó Guinzburg, que remarcó que para ella el encuentro de este viernes fue una experiencia ” muy emocionante”.
Cuando le llegó la invitación la humorista pensó que era una broma pero no fue la única, “me di cuenta hablando con gente de otros países que fuimos varios los que pensamos lo mismo, como que era raro”, y confesó que usará esta experiencia para crear contenido.
La actriz mexicana Florinda Meza sostuvo que “esto que acaba de hacer el papa es una raya en el agua, es sorprendente y admirable”, y añadió que “hay que tener una mente muy aguda y ser muy inteligente para considerar la comedia como él lo hace”.
Entre los humoristas de exposición internacional que asistieron se encuentran los estadounidenses Stephen Colbert, Jimmy Fallon, Jim Gaffigan, Conan O’Brien, Chris Rock, Tig Notaro y Whoopi Goldberg, aunque la mayoría de cómicos que asistieron son italianos.
El objetivo de este encuentro fue “celebrar la belleza de la diversidad humana y promover un mensaje de paz, amor y solidaridad, y promete ser un momento significativo de diálogo intercultural y de intercambio de alegría y esperanza”, aseguró el Vaticano.
El humor “denuncia excesos del poder” o realidades invisibilizadas haciendo reír, “sin sembrar la alarma o el terror”, destacó este viernes el papa Francisco, en un reunión con humoristas y actores de comedia de todo el mundo como los estadounidenses Jimmy Fallon o Chris Rock.
Los humoristas “despiertan el sentido crítico haciendo reír y sonreír”, y “lo hacen contando historias de vida, narrando la realidad”, por lo que “hablan a la gente de problemas grandes y pequeños”, dijo el pontífice en un discurso ante los asistentes.