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Irracional aumentar el gasto a servicios generales en 7 mil 300 millones de pesos y sólo destinarle mil 500 millones a infraestructura: Cuauhtémoc Estrada Sotelo

Ante la entrega del Paquete Económico 2025 por parte del secretario de Hacienda del Gobierno del Estado, José de Jesús Granillo Vázquez, al Congreso del Estado, el coordinador de los diputados de morena, Cuauhtémoc Estrada Sotelo, expresó su preocupación por las cifras del presupuesto y destacó que se debe realizar un análisis exhaustivo sobre las asignaciones y posibles aumentos en el gasto.

Estrada Sotelo subrayó que lo más deseable es evitar que este Paquete Económico repita los errores de los años anteriores, donde se registraron aumentos desproporcionados en diversos rubros, como en el caso de Servicios Generales. En 2022, el presupuesto para este concepto fue de 2 mil 346 millones de pesos, mientras que para el ejercicio 2023 y 2024 se incrementó considerablemente, alcanzando los 7 mil 400 millones de pesos solo en el primer trimestre de 2024.

“Es un hecho preocupante que, mientras el gasto en servicios generales se dispara, se destinen solamente mil 500 millones de pesos para infraestructura en el estado. Esta asignación resulta completamente desproporcionada y carece de un balance adecuado entre las necesidades de la población y la distribución del presupuesto,” comentó Estrada Sotelo.

El legislador cuestionó la lógica detrás de este enfoque, especialmente considerando que el estado recibe un ingreso adicional promedio anual de 10 mil millones de pesos. “¿Cómo es posible que se destinen sumas tan bajas para obras de infraestructura esenciales, mientras el gasto en servicios generales continúa en aumento? Esta distribución no refleja una verdadera prioridad para el desarrollo y bienestar de los chihuahuenses,” agregó.

Estrada Sotelo concluyó haciendo un llamado a los legisladores y al gobierno estatal para que revisen con detenimiento el Paquete Económico 2025 y garanticen una asignación más equitativa de los recursos, que permita una inversión real en las áreas que más necesita la población, como la infraestructura, sin sacrificar la eficiencia en el manejo del gasto público.